Puedes añadir las verduras que quieras.
El jengibre fresco puedes eliminarlo o sustituirlo por jengibre en polvo al gusto.
Si no tienes todas las especias no te preocupes, usa lo que tengas a mano.
Echa la cayena poco a poco para no pasarte. Puedes añadir más o menos cantidad o eliminarla si quieres.
Lo ideal es usar leche de coco casera o de lata, pero no bebida de coco (suele llevar más aditivos y endulzantes en muchas ocasiones).
El concentrado de tomate se podría sustituir por salsa de tomate o incluso por tomates frescos (en ese caso es mejor cocinar el tomate al principio junto con el resto de verduras).
El zumo de lima se puede sustituir por zumo de limón.
La harina de coco sirve para espesar el curry, pero es totalmente opcional.