Combina los ingredientes secos, harina, polvo para hornear, bicarbonato y sal en un tazón.
Mezcla en otro tazón leche, azúcar, extracto de vainilla y aceite hasta integrar, reposa por 10 minutos y bate ligeramente.
Vierte la mezcla líquida a la mezcla seca y revuelve hasta integrar.
Bate el agua de garbanzo hasta que doble su tamaño y forme picos. Añade a la masa con movimientos envolventes y suaves para no perder aire.
Calienta un sartén a fuego medio y engrasa con un poco de aceite de coco. Usa una cuchara de helado o ¼ de taza para medir tus hot cakes.
Cocina por 40 segundos de cada lado o hasta que burbujas se formen en la superficie y los lados se vean cocidos.
Voltea y cocina del otro lado. Continúa con el resto de la mezcla. Sirve los hotcakes calientes con el resto de los ingredientes y disfruta.