Desde mi punto de vista, ¡buenas noches! O «v», ya que hoy les presentamos una receta tradicional griega modificada para que sea apta para veganos. En lugar de láminas de pasta, las capas de moussaka vegana o moussaka, que también se conoce simplemente como moussaka, están hechas de capas alternas de patata y berenjena. Absolutamente impecable. Además, lleva una deliciosa bechamel vegana por encima.
De hecho, la musaka es un plato tradicional de una región relativamente extensa que abarca desde los Balcanes hasta Oriente Medio. A pesar de que es una receta que tiene una larga historia en Grecia. Hay muchas versiones diferentes de este plato, y algunas incluso añaden otras cosas como calabacín o setas. Estas variaciones varían de un país a otro. De hecho, la palabra «saqqa» tiene su origen en la frase árabe «congelarse, volverse blanco», de donde procede su nombre. Podemos hacer esta suposición debido al hecho de que cuando se vierte la última capa de bechamel por encima, se asemeja a una especie de prado nevado (poniéndose muy poético y creativo).
La dieta mediterránea es una de nuestras favoritas no sólo porque es abundante en todos los grupos de alimentos y nutrientes esenciales, sino también por el hecho de que comparte muchas características con la cocina árabe. A pesar de que se puede preparar con productos de nuestro entorno inmediato, este plato consigue trasladarnos al idílico escenario de una isla griega.
En cuanto a la musaka, la situación es algo análoga a la del salmorejo andaluz, ya que todo el mundo afirma que su receta es la más auténtica, la mejor y la más original. Sin embargo, la nuestra es realmente la mejor, ¡así que deberías probar esta moussaka vegana! El producto final es delicioso, y el proceso es mucho más sencillo de lo que parece.
Musaka Vegana
Ingredientes
- 5 grandes papas blancas peladas y cortadas en trozos
- 4 dientes de ajo pelados
- ¼ de taza más 2 cucharadas. aceite de oliva
- 1 cebolla grande picada 1 ½ tazas
- 3 cucharadas de orégano seco
- 800 g de tomates triturado lata
- ⅔ taza de lentejas verdes
- 1 hoja de laurel
- 1 palo de canela
- 2 berenjenas medianas en rodajas
- 2 calabacines pequeños en rodajas
- 3 tomates en rodajas finas
Elaboración paso a paso
- Cocinamos las papas y el ajo en agua hirviendo con sal durante 10 minutos o hasta que estén blandas. Lo colocamos y reservamos el líquido. Vertemos sobre el puré 1/4 de taza de aceite de oliva y 2 tazas de líquido de cocción. Condimentar con sal y pimienta.
- Calienta 2 cucharadas de aceite de oliva en una cacerola a fuego medio. Añadir la cebolla y el orégano y rehogar 5 minutos. Añadir los tomates, lentejas, la hoja de laurel, la rama de canela y 3 tazas de líquido de cocción de la patata.
- Tapamos y reducimos el fuego a medio-bajo y cocinamos a fuego lento 45 minutos, o hasta que las lentejas estén tiernas.
- Retirar la hoja de laurel y la canela, pasamos las lentejas por procesador de alimentos hasta que quede un puré grueso. Condimentar con sal y pimienta.
- Colocamos las rebanadas de berenjena en una bandeja para hornear con servilletas de papel mojadas, y espolvorear con sal. Dejar reposar 30 minutos. Enjuagar y secar.
- Precalentamos el horno a 180 ° C. Rociamos muy levemente el fondo de una fuente para hornear con un poquito de aceite de oliva.
- Sobre él cubrimos el fondo con 1 1/2 tazas de la mezcla de lentejas. Cubrir con la berenjena, seguido de calabacín y tomates. Agregamos 2 tazas de la mezcla de lentejas sobre la parte superior. Extendemos bien la mitad de las papas sobre la mezcla de lentejas. Cubrir con la berenjena restante, y la mezcla de lentejas. Difundir las patatas restantes sobre la parte superior, asegurándose de cubrir por completo.
- Hornear 30 min o hasta que se dore la parte superior.